Juanetes (Hallux Valgus)
La principal causa prevenible de los juanetes son los zapatos estrechos y/o tacones altos. El dedo que se ve afectado es el dedo gordo, que debido a una mala posición al andar, sumado a una predisposición genética, se deforma de manera protuberante hacia el exterior.
Los juanetes pueden ser dolorosos e incómodos. Evítelos usando zapatos adecuados para su talla. Si padece de juanetes, consulte al médico para que lo evalúe y derive a un especialista de ser necesario. Probablemente precisará de un cambio de zapatos, plantillas especiales y, si son muy acentuados, cirugía.
Uñas encarnadas (Onicocriptosis)
Se producen cuando la uña se dobla hacia abajo y crece dentro la piel. Se deben a varios factores, entre ellos: golpes, presión provocada por zapatos estrechos, cortar las uñas de manera incorrecta o cortarlas muy cortas. Las uñas encarnadas son dolorosas y muy problemáticas si se infectan, pero pueden corregirse. Si una uña se encarna continuamente, en ocasiones es necesario realizar una pequeña cirugía. Consulte al médico si tiene esta dolencia, especialmente si hay una infección (mal olor, pus, aumento del dolor).
Las uñas encarnadas se pueden prevenir:
– Cortando las uñas en línea recta.
– Manteniendo la higiene en los pies para evitar infecciones.
– Evitando el uso de zapatos apretados.
– Evitando el uso de zapatos muy sueltos, ya que al caminar velozmente o correr se ejerce presión en los dedos.
Infecciones por hongos (Tiña Pedis u Onicomicosis)
Las infecciones debidas a los hongos pueden tener muchas causas, entre ellas, la falta de higiene y la poca ventilación del calzado. Los síntomas son generalmente el mal olor, picazón y una coloración más oscura de los dedos.
Los hongos también pueden producirse por andar descalzo al aire libre o por casa, pisando en lugares contaminados con hongos (duchas y baños con mala higiene, etc.). Si los hongos afectan a las uñas, éstas se decoloran y adquieren mal olor. En cualquier caso, debe consultar al médico porque la solución a este problema requiere de medicación y de constancia en su aplicación.
Una manera de evitar los hongos es secar bien los pies tras bañarse o transpirar, dejando que los zapatos se sequen también y permitir una ventilación adecuada de los mismos.
Mascarilla natural para los pies
Como toda la piel de nuestro cuerpo, los pies necesitan ser exfoliados y humectados. A continuación, una receta para que preparemos en casa y le devolvamos la suavidad a esta zona de nuestro cuerpo que tanto trabaja.
Ingredientes:
– 1 clara de huevo
– 1/2 taza de avena
– 3 cucharadas de jugo de limón
– 3 cucharadas de leche
Aplicación:
Mezclar todo hasta lograr una consistencia espesa. Lávese los pies y aplíqueles la mascarilla. Cuando la mascarilla se seque, lave los pies nuevamente.