“Estuvieron hermosas las canciones, también el cuento… me gustó todo”. Son las palabras de Catalina Soto, alumna de quinto básico de la Escuela Antupirén de Hornopirén, uno de los establecimientos invitados a la “Primera Jornada Literaria Hualaihué Lee”, evento realizado el viernes 26 de noviembre en el Mercado Típico de Hornopirén.
“Estuvo bonito el cuento, porque como que lo actuó. También me gustó la canción. Nunca había conocido a una escritora y los poemas me parecieron sorprendentes”, agregó Paula Velásquez, de la Escuela Rural Aulen, del sector costero de Hualaihué.
Ellos fueron algunos de los alumnos seleccionados por sus profesores de lenguaje para participar en esta jornada, financiada por el Fondo Nacional de Fomento del Libro y la Lectura 2010 del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
Según Flavia Labbé, ejecutora de este proyecto –uno de los 330 ganadores de los más de 12.000 que postularon a este fondo- el objetivo fue potenciar el interés y el gusto por la lectura en los niños de la comuna. “El aislamiento natural en que nos encontramos dificulta el acceso a los distintos bienes culturales que se ofrecen en las grandes ciudades, además, consideramos que hacía falta incentivar el hábito lector en Hualaihué. En este sentido, creemos que la niñez es la edad clave para fomentar la lectura para que ésta se transforme en un hábito. Por eso es que dedicamos esta jornada a los niños de la comuna”, expresó.
El programa comenzó a las 9:45, con la llegada de los alumnos de las escuelas de Contao, Aulen, Rolecha, Hualaihué Puerto, El Manzano y Antupirén, con sus respectivos profesores acompañantes. Entrando a la sala principal del Mercado Típico, los asistentes recibieron, de regalo, los libros Aromas de infancia de la escritora de Palena Bernardita Hurtado y Puerto Cauquil, cuentos de mar y bordemares de Sonia Caicheo, autora que viajó desde Castro para estar en el evento.
Prosiguió el show de la actriz de Puerto Montt Catalina Saavedra, quien narró el cuento La Huachita Cordera, dramatizándolo y cautivando a grandes y chicos con su actuación.
Después, las escritoras Sonia Caicheo y Bernardita Hurtado presentaron sus libros Puerto Cauquil, cuentos de mar y bordemares y Aromas de Infancia, respectivamente, contándoles a los niños lo que las inspiró a escribirlos e invitándolos a leerlos.
Posteriormente fue el turno del Sexteto de Guitarras de Hornopirén, quienes presentaron su musicalización del poema Pedacito de mi tierra, de la poetisa de Hornopirén María Báez.
Tras eso hubo un recreo, con colaciones y snacks incluidos, en el que los niños tuvieron la oportunidad de pedirle a las escritoras invitadas que les autografiaran sus ejemplares. “Ningún niño se quedó sin su autógrafo, nos sentimos como en la Feria del Libro de Santiago”, dijeron después las autoras.
Ese momento se aprovechó también para hacer entrega, a los profesores acompañantes, de los 40 libros que donó para la ocasión la Editorial Alfaguara del Grupo Santillana, los que fueron distribuidos entre las distintas escuelas asistentes y la Biblioteca Pública de Hornopirén.
Finalmente, el grupo de niños se dividió en dos, para que 27 participaran en un taller de poesía infantil dirigido por Sonia Caicheo, y los 23 restantes en el taller de creación literaria de Bernardita Hurtado. Cerca de las 14:00 horas estos talleres culminaron y los niños fueron llevados de regreso a sus respectivos hogares.
“Fue hermoso, insinué cuatro técnicas para introducirlos a la poesía y se lograron trabajos muy bellos”, comentó Sonia Caicheo. Bernardita Hurtado manifestó que “estas actividades son importantes porque es un derecho de todos el poder acceder a los bienes culturales, tanto en las grandes ciudades como en los pequeños pueblos como éste y todos los de la Provincia de Palena. Felicito a las ejecutoras por esta linda iniciativa y les agradezco la invitación. En cuanto a los niños, ellos demostraron que pueden hacer cosas maravillosas. Nosotros trabajamos con una técnica para crear cuentos a partir de dos palabras distintas entre sí, y los resultados fueron hermosos”.
Así lo ratificaron los alumnos que participaron en su taller, los que fueron divididos en cuatro grupos: “Fue muy divertido, porque con dos palabras muy diferentes, sillón y pasión, inventamos un cuento entre todos. Es una técnica nueva para nosotros”, comentaron los alumnos de la Escuela Semillero de Rolecha.
Diego Gallardo, del Colegio Mauricio Hitchcock de Contao, añadió que “fue mortal, porque hablamos de la expresión de los sentimientos y de que se puede aprender mucho de cada palabra, porque con cada palabra que a uno se le ocurra se puede escribir un cuento. Además, fue bacán trabajar en grupo para hacer un cuento”.
Los profesores acompañantes también se fueron satisfechos. “El trabajo directo con las escritoras y que los niños se lleven sus libros autografiados hacen de esta jornada una experiencia muy bonita. Claramente hay más interesados en el tema, por eso sería bueno que este tipo de iniciativas se replicaran en las escuelas… Por otra parte, la rutina de la actriz Catalina Saavedra fue maravillosa y es algo que nos sirve a los profesores también, porque la dramatización es un elemento que puede hacer mucho más atractiva una clase, una lectura, lo que sea. Fue una experiencia motivante que les servirá a los que vinieron para abrirse más a la lectura, algo que transmitirán a sus compañeros que no asistieron”, argumentó Guacolda Escalona, profesora de lenguaje de la Escuela Semillero de Rolecha.
“Seguiremos postulando en los próximos años para que esta jornada crezca y se transforme en una tradición. Estamos muy motivadas porque los resultados fueron excelentes y todos se fueron muy contentos”, concluyó Flavia Labbé.