Practicar deporte en la época escolar favorece de múltiples maneras a los niños. Así lo afirman los expertos como el psicólogo Federico Viertel de la Escuela Antupirén de Hornopirén, quien destaca algunos de los beneficios de comenzar con la actividad física a temprana edad. “A través de los deportes colectivos como el fútbol, los niños dan sus primeros pasos socializadores dentro de un esquema normado. Con esto se favorece su ingreso a la sociedad de manera sana”.
Agrega que el deporte, al igual que el juego en general, le enseña a los niños a seguir reglas, lo que permite introducir el respeto y los límites en el diario vivir.
Por otra parte, el deporte ayuda a superar la timidez, porque reta a participar a riesgo de perder. “Generalmente el temor se funda en el miedo a perder algo o a recibir una sanción por nuestro error. El deporte enseña a ganar y a perder, desarrollando además la tolerancia a la frustración y la resilencia, la cual nos permite levantarnos y seguir compitiendo, afrontado de mejor manera los desafíos en la adultez”, explica Federico Viertel.
Otros aspectos positivos de introducir el deporte en la educación desde una edad temprana es que se frenan los impulsos excesivos de los menores, modulándolos y focalizándolos en una actividad física normada. También, que los niños serán más colaboradores y menos individuales y que el deporte ayuda a reconocer y respetar que existe alguien que sabe más que ellos, como el entrenador.
“El deporte también expande las posibilidades motoras de los niños, potencia la creación y la regularización de hábitos, en especial los higiénicos y saludables, y desarrolla el placer por el movimiento, evitando así el sedentarismo en la adultez. Además, le transmite a los niños el sentido de la responsabilidad”, añade Federico Viertel.
El ejemplo de la Escuela de Fútbol de El Manzano
Quienes tienen esto muy claro son los cerca de 25 alumnos de la Escuela de Fútbol de El Manzano, que comenzó hace ocho meses por iniciativa de profesor de la escuela de la misma localidad Ever Gutiérrez.
“Es mucho mejor hacer deporte que tomar otros caminos como la droga o el alcohol, además a través del fútbol nos conocemos más entre nosotros y conocemos a más personas… Todos queremos llegar a ser futbolistas profesionales”, manifiesta Fabián Valderrama, quien tiene 11 años y está en la Escuela de Fútbol desde que ésta empezó.
Su compañero Danilo Triviño, de 13 años, opina de manera similar: “El deporte sirve para aprender y salir a conocer otros lados, y para no quedarse en la casa encerrado y aburrido”.
Ever Gutiérrez cuenta que su principal motivación para partir con esta escuela fue ver que los niños de El Manzano, su tierra natal, no tenían alternativas de distracción. “Terminando el colegio se iban para sus casas, sin mayores objetivos por los que luchar. Y como acá en el sector lo que más se practica es el fútbol, me pareció importante poderle entregar a los niños lo que uno sabe. Además, en la comuna no hay un trabajo fuerte con el área infantil, todas las competencias se enfocan en los adultos, y los niños son la base para que podamos mejorar la calidad del fútbol local”, expresa este profesor de educación básica que formó parte de las Divisiones Juveniles de Deportes Puerto Montt, mismo club en el que jugó por un año como profesional, actividad que tuvo que abandonar por una lesión a la rodilla.
Tras algunos meses, esta escuela fue apoyada por un proyecto de la Asociación Nacional de Fútbol Rural (ANFUR), gracias al cual han logrado adquirir equipamiento. La municipalidad, a través de la Oficina de Deportes, también los ha respaldado, especialmente con los traslados a las competencias y partidos amistosos, al igual que los padres de los deportistas. “Hemos tenido logros importantes y hemos ido a jugar a varias comunas. En marzo estuvimos en un cuadrangular provincial en Cochamó y obtuvimos el segundo lugar, eso nos insta a seguir trabajando para, por qué no, hacer de esto una ventana para aquellos que quieren optar al fútbol profesional. No es algo imposible, de hecho ya hay un vecino del sector, Vladimir Herrera, que lo logró, y que actualmente está en Deportes Puerto Montt”, dice el entrenador.
Tampoco se trata de descuidar los estudios, porque los alumnos que están en esta escuela deben tener un buen rendimiento y comportamiento escolar para poder participar en los entrenamientos y campeonatos. “Así, los niños aprenden lo que es la responsabilidad. Además, a veces introducimos otras asignaturas a los entrenamientos, como las matemáticas. En cuanto a los valores que el fútbol transmite, el más fundamental es el respeto hacia el compañero y el rival”, concluye Ever Gutiérrez.