“Para mí y mi familia éste es el regalo más hermoso de la navidad de este año”. Son las palabras de María Sánchez, una de las dueñas de casa del Rolecha que desde este lunes 16 de noviembre cuenta con electricidad en su hogar.
Hasta ahora las familias de Rolecha y de las localidades aledañas –Tentelhué, Curamín y Nao-, se las arreglaban con un motor comunitario que funcionaba a petróleo y que les proporcionaba electricidad sólo por algunas horas al día (de 16:30 a 23:30 hrs. en invierno y de 20:30 a 23:30 hrs. en verano), a un alto costo en dinero y con un gran sacrificio por parte de quienes lo operaban.
Este Proyecto de Electrificación Rural -ejecutado por SAESA y que contempló una inversión de 490 millones de pesos, los que fueron financiados vía F.N.D.R.- se encontraba en tramitación desde el año 2001. Recién en octubre del año pasado obtuvo la RS, tras lo cual rápidamente se puso en marcha su implementación.
María Sánchez, de Rolecha.
“Estuvimos en terreno y comprobamos que efectivamente a la gente le había llegado la energía a sus hogares. Estamos todos contentos porque es un tremendo logro contar con electricidad las 24 horas del día. Evidentemente esto también permite el desarrollo de iniciativas como nuevos negocios que van a contribuir a elevar la calidad de vida del sector costero de la comuna, especialmente de estas 245 familias”, manifestó Freddy Ibacache, alcalde de Hualaihué.
“Quiero destacar la voluntad y el esfuerzo que hicieron el Gobierno Regional y SAESA porque desde que partimos en octubre del año pasado con el proyecto contamos con su apoyo y logramos cumplir con los plazos inicialmente planteados”, agregó.
Pese a la fuerte lluvia y al viento que azotó a la comuna mientras los técnicos de SAESA afinaban los últimos detalles y conectaban los postes en Curamín, varios habitantes de esa localidad se acercaron a presenciar el histórico momento.
Freddy Ibacache junto a vecinos de Curamín.
Mariadi Árgel Soto, nacida y crecida en Curamín, contó que “yo me crecí con velas y los fuegos de los fogones, ahora hace unos años teníamos el motor, pero como eran pocas horas al día a veces no alcanzábamos ni a cenar y quedábamos a ocuras. Además de que se echaba bastante a perder. Ahora estamos muy contentos, nos va a cambiar la vida”.
Judith Árgel, también de Curamín, expresó que “agradecemos a SAESA y al alcalde que ha hecho mucho por nosotros, desde que él entró se vio un adelanto muy grande, estamos muy felices porque vamos a tener luz día y noche, vamos a poder escuchar música a la hora que queramos… Es un momento que estábamos esperando con las mismas ansias que el año nuevo”.
Los funcionarios de SAESA estuvieron el lunes 16 y martes 17 verificando que las 245 familias, las sedes sociales, la posta y los demás establecimientos quedaran conectados. Los trabajos de postificación, de extensión de la línea y las instalaciones interiores habían comenzado entre los meses de marzo y abril. Para conectarse, cada una de las familias tuvo que cancelar 150 mil pesos. Una vez que el 80% de las familias hubo pagado, SAESA dio el vamos definitivo a la luz.
Norma Árgel, de Punta Nao.
“Especialmente en el verano era muy complicado porque si la luz de Rolecha no llegaba en buenas condiciones teníamos que gastar en nuestro propio generador, porque como tengo un boliche necesito congelar algunos productos. Entonces cómo se nos va a aliviar la vida… El lavado sólo se podía hacer de noche, en vez de estar descansando había que aprovechar de lavar, todo por un promedio de 15 mil pesos al mes por unas pocas horas de luz al día”, reflexionó la vecina Norma Árgel, de Nao.
José Aníbal Mansilla, Secretario de la Junta de Vecinos de Rolecha y encargado de operar el antiguo motor, reconoció que “ya no dábamos más, pasábamos tantas penas… Los mismos usuarios manteníamos el motor, pero faltaba mucha plata para llegar al mes, la verdad es que ya no dábamos abasto”.
“Fue bastante trabajo, organizar los vecinos, tocar cada una de las puertas, porque ya de tanto esperar nadie creía mucho, pero por eso quiero agradecer al alcalde por su apoyo y porque agilizó el asunto. Yo estoy feliz y tranquilo”, añadió Claudio Álvarez, Presidente de la Junta de Vecinos de Rolecha.
El próximo desafío del municipio es que la localidad de Quetén -la única del sector costero junto a Puntilla Pichicolo que falta por electrificar- pueda conectarse al circuito dentro de un corto plazo. “Ya estamos trabajando con el Gobierno Regional para conseguir ese anhelado proyecto. Como alcalde estoy muy contento de ver cómo se van concretando proyectos por los que la gente ha luchado por años, así que le envío un saludo a toda la comunidad de Nao, Curamín, Tentelhué, Rolecha y a la comuna en general, porque yo sé que lo que beneficia a algunos nos hace feliz a todos los que vivimos en Hualaihué”, concluyó Freddy Ibacache.
